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Cervezas antiguas de Dogfish head

Dogfish Head elabora una serie de cervezas que recrean y se inspiran en recetas antiguas y la historia que las rodea, las Ancient Ales.


Todo empezó allá por el año 1995, cuando empezaron a experimentar con ingredientes como la achicoria, el regaliz, el jarabe de arce o las pasas entre otros para hacer cervezas extremas y exóticas que se salieran de la norma. Pero no fue hasta 1999 cuando empezaron a trabajar con Patrick Mc Govern, el director del laboratorio de arqueología biomolecular del museo de la Universidad de Pennsylvania y reputado experto en bebidas antiguas, y fruto de dicha colaboración nació la serie Ancient Ales.


La primera elaboración que vio la luz fue la Midas Touch, algo a camino entre un vino y un hidromiel. Se trata de una cerveza dulce y seca elaborada con miel, uvas moscatel y azafrán, tal y como revelaron unas vasijas de 2700 años de una tumba turca que se cree pertenecieron al rey Midas. 9% de alcohol.



En segundo lugar llegó Chateau Jiahu, una cerveza basada en los ingredientes que supuestamente contuvieron unas vasijas de cerámica en una tumba de 9000 años de Jiahu, una villa neolítica del norte de China. Los ingredientes utilizados en su elaboración fueron bayas de espino albar, arroz de sake, cebada malteada, uva moscatel y miel de azahar. El mosto se fermenta durante un mes con levadura de sake antes de ser embotellada. 10% de alcohol.


Otro análisis de fragmentos de cerámica, en este caso de 3000 años de antigüedad y encontrados en Honduras, ayudaron a inspirar Theobroma, la tercera cerveza de la serie y supuesta bebida alcohólica hecha con chocolate como base y que usaban las civilizaciones mayas para brindar en ocasiones especiales. Está elaborada con cacao Askinosie, miel, chiles y achiote. 9% de alcohol.


Sah’tea continuó la serie, basada en una receta del sahti finlandés del s.IX. El mosto se carameliza sobre rocas ardientes y se fermenta con levadura de weizen alemana. Al mosto se le añaden té negro, cardamomo, canela, jengibre, clavo y pimienta negra. 9% de alcohol.


La quinta en ver la luz fue Ta Henket, inspirada en una receta escrita en jeroglíficos egipcios. Elaborada como las antiguas bebidas de pan, pero añadiendo manzanilla, fruto de la palma Doum y hierbas de Oriente Medio. Para fermentarla usaron una cepa egipcia de Saccharomyces, nativa de El Cairo. 4,5% de alcohol.


En sexto lugar salió a finales de 2011 fue Birra Etrusca, basada en unos estudios hechos en unas tumbas etruscas de 2800 años de antigüedad. Fue una colaboración entre Sam de Dogfish, Leo de Birra del Borgo y Teo de Baladin, quienes dejaron reposar la cerveza en vasijas de broncede terracota así como también en barricas de madera respectivamente. Los ingredientes esta vez fueron cebada de dos hileras, además de un tipo de trigo italiano antiguo, harina de avellana, granadas, miel de castaño italiano, miel de flores de Delaware (donde tiene su sede Dogfish) y miel de trébol. También se añadió un puñado de lúpulo, pero casi todo el amargor de la cerveza proviene de la raíz de genciana y la mirra etíope utilizadas. 8,5% de alcohol.


En 2013 sale una recreación de un estilo nórdico a base de trigo llamado Kvasir.
La receta de Kvasir fue desarrollada con la ayuda de evidencia química, botánica y de polen tomada de un buque de bebida danés de 3.500 años de antigüedad. El recipiente, hecho de corteza de abedul, fue encontrado en la tumba de una bailarina o sacerdotisa vestida de cuero.
El análisis, hecho con el arqueólogo biomolecular Dr. Patrick McGovern, señaló los ingredientes que Dogfish utiliza en esta nueva cerveza única: trigo, arándanos rojos (Vaccinium vitis-idaea), arándanos, mirto (Myrica gale), yarrow, (Achillea millefolium) miel y jarabe de abedul.