- 400 gr de leche condensada
- 200 ml de nata líquida
- 160 gr de chocolate negro de repostería
- 250 ml de leche
- 200 ml de Whisky (Podéis echar más si os va el alcohol)
- 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
Elaboración:
- En un recipiente apto para microondas se vierte la nata líquida junto con el chocolate negro en trozos, de programa en descongelación 2 minutos y removemos con unas varillas. Repetimos esta operación las veces que sea necesarias hasta que el chocolate se funda correctamente. Cuidado de no quemar el chocolate, que sino estará muy amargo.
- En el vaso de la batidora eléctrica se vierte el chocolate fundido junto con la nata, se añade la leche y el whisky sin dejar de remover la mezcla y a continuación se añade poco a poco la leche condensada y la esencia de vainilla si optamos en incorporarla. Mezclamos durante 2 minutos.
- Con ayuda de un embudo vertemos la mezcla en una botella de cristal, en un frasco o el recipiente que dispongáis para ello, se deja enfríar.