Los piratas acostumbraban a beber ron en los largos viajes de todas sus fechorías. Lo bebían para sobrellevar el duro viaje por los océanos, como un entretenimiento. El ron subía rápido a la cabeza y convertía ese ambiente tan tenso, apático y desolador en momentos de alegría en todo el barco.
Todo el mundo relaciona el ron con los piratas pero en las bodegas del barco también tenían barriles de cerveza. ¡Y en abundancia! Como casi todos los barriles, robados en asaltos a otros barcos mercantes, y solían tener cerveza de tipo Stout o Porter que usaban, sobretodo, para el consumo diario como reconstituyente y bebida energética, para sobrellevar las pesadas tareas del barco.
Los capitanes tenían algo de conocimiento de cerveza y reservaban el mejor barril de cerveza para apaciguar los motines a bordo. Era doloroso usar un barril caro de ron para apaciguar los motines y contentar a la tripulación, por eso usaban el mejor barril de cerveza que tenían a bordo pues no era tanta la pérdida material y con frecuencia la cerveza estaba agria o en malas condiciones.