- Emplea materiales cuyo uso sea seguro.
- Como recipiente de fermentación, solo deberás usar cubetas plásticas de grado alimenticio o garrafones de vidrio.
- Cerciórate de que la tapa también sea de grado alimenticio.
- Ten en cuenta que de vez en cuando podrías tener que batir la preparación; por ello, los recipientes como las cubetas suelen ser lo ideal.
- Un recipiente de 28 L (7,5 galones) te permitirá preparar lotes de 21 a 23 L (de 5,5 a 6 galones).
- Deja un espacio adicional. Necesitarás un espacio aproximado de 6 a 8 L (de 1,5 a 2 galones) en un recipiente de 28 L (7,5 galones). Esto brindará un espacio para la espuma y los gases que se forman durante la fermentación. Si no dejas un espacio suficiente, la presión puede acumularse y expulsar la tapa del recipiente, lo que haría que se contamine.
- Airlock: Prepara la tapa. Tendrás que hacer un agujero en la tapa que tenga el tamaño adecuado para una arandela de goma y una esclusa de aire. Introduce la arandela en el agujero. Luego coloca la esclusa de aire por la parte superior de la arandela. Coloca una junta de goma alrededor del borde de la tapa para formar un sello hermético entre el recipiente y la tapa.
- Limpia y desinfecta el equipo. Debes limpiar y desinfectar el recipiente de fermentación (y el tapón de goma de un recipiente de vidrio o la tapa de una cubeta plástica), la esclusa de aire y una cuchara grande.
- Llena por completo el recipiente de fermentación con un desinfectante (como el yodoformo) que esté hecho para la elaboración de cerveza y vino. Puedes conseguir todos estos objetos en las tiendas para la elaboración casera de vino y otras bebidas alcohólicas.
- Determina la cantidad de azúcar (sacarosa) que usarás. Si usas más azúcar, tendrás más alcohol, siempre y cuando la levadura pueda procesarla por completo. Si deseas un lote menor (menos alcohol), puedes usar menos azúcar. Como regla general, cada paquete de levadura tendrá instrucciones sobre la cantidad de azúcar que pueda emplearse.
- Si vas a preparar 2 lotes, debes usar el doble de levadura (2 paquetes).
- Disuelve el azúcar. Disuelve el azúcar vertiéndola en una olla con agua caliente. Puedes usar agua de grifo o agua embotellada. El agua debe estar a una temperatura aproximada de 32 °C (90 °F). Usa aproximadamente de 13 a 17 kg (de 30 a 40 lb) de azúcar.
- Vierte la solución de azúcar en el recipiente. Una vez que el azúcar se haya disuelto por completo, vierte con cuidado la solución de azúcar y agua en la cubeta plástica o el garrafón de vidrio que usarás como recipiente de fermentación. En el caso de un recipiente de 28 L (7,5 galones), vierte de 6 a 8 L (de 1,5 a 2 galones) de la solución. La levadura descompondrá esta azúcar para producir alcohol.
No es necesario esterilizar la solución de sacarosa antes de la fermentación; no obstante, si deseas hacerlo, hiérvela por 15 a 20 minutos. Ten en cuenta que parte del agua se evaporará, por lo que deberás agregar un poco más antes de hervir. - Agrega la levadura. Abre el paquete de levadura y viértela en la solución de azúcar y agua. En caso de usar una cubeta plástica, deberás batir para obtener una mezcla uniforme. Usa un embudo seco y desinfectado para evitar ensuciar cuando eches la levadura por la abertura angosta de un garrafón.
- Usa un paquete de levadura. Si usas más levadura, esto puede acelerar el proceso, pero no generará un alcohol de mejor rendimiento.
No viertas la levadura en la solución de azúcar y agua hasta que esta se haya enfriado. Si el agua está demasiado caliente, esta matará a la levadura. - Espera un día. En los primeros días de fermentación, la levadura dedicará la mayor parte de su energía a multiplicarse. Este proceso requiere oxígeno, por lo que deberás dejar el recipiente destapado durante las primeras 24 horas. Si cortas de inmediato el suministro de oxígeno para la levadura, el proceso de fermentación tomará mucho más tiempo y podría darse con lentitud.
- Fija la tapa a la cubeta. Si vas a usar una cubeta plástica, presiona la tapa con firmeza para formar un sello hermético. Esto podría ser un poco difícil, y podrías tener que aplicar un poco de fuerza. Se requiere un sello hermético para llevar a cabo una fermentación adecuada.
La fermentación es un proceso anaeróbico (carece de oxígeno). - Agrégale agua a la esclusa. Si aún no lo has hecho, introduce la esclusa en la tapa si vas a usar una cubeta plástica. Si vas a usar un garrafón, este será el momento de introducir la esclusa a través de un tapón de goma perforado, y colocar esta tapa en la boca del garrafón de forma ajustada. Vierte agua limpia o vodka en el interior de la esclusa, así la solución en fermentación podrá liberar dióxido de carbono mientras el aire se mantiene fuera. La disminución del oxígeno disponible hará que la levadura deje de multiplicarse y que empiece a producir etanol y dióxido de carbono.
- Deja que la mezcla se fermente. Mantén la temperatura ambiente entre 21 y 27 °C (70 y 80 °F). Esta temperatura fomentará un rendimiento óptimo por parte de la levadura. La levadura deberá producir alcohol en alrededor de 2 a 10 días. El tiempo requerido variará según el tipo de levadura que hayas usado y la cantidad de azúcar agregada. Se requerirá más tiempo para fermentar por completo una mayor cantidad de sacarosa.
- Detén el proceso. Brotarán muchas burbujas en la esclusa durante la fermentación activa. El burbujeo se ralentizará conforme la fermentación se vuelva más lenta y se detendrá por completo luego de fermentar la mayor parte de la sacarosa o su totalidad. Si no estás seguro, deja el lote por 1 o 2 días más. Cuando la fermentación termine, será el momento de purificar el alcohol.
- Clarifica el líquido alcohólico fermentado. Luego de completar la fermentación, usa un agente clarificante (como la cola de pescado) para eliminar la levadura suspendida y cualquier otro material que pueda encontrarse en el líquido. Intenta conseguir cola de pescado que no contenga sulfitos, ya que algunas personas son alérgicas a ellos. Luego de agregar los agentes clarificantes, vuelve a sellar el fermentador con la tapa o el tapón y la esclusa, y deja que el líquido se aclare por 2 o 3 días.
Usa de 0,5 a 1 gramo de cola de pescado por cada 19 L (5 galones) del lote. - Drena el líquido alcohólico usando un sifón o vertiéndolo. Drena el líquido usando un sifón o vertiéndolo con cuidado en un garrafón de vidrio u otro recipiente de cierre hermético como un barril Cornelius. Deja el sedimento indeseado en el recipiente de fermentación. También puedes verter el líquido mediante una almohadilla filtrante o un filtro de membrana (como un filtro de vino) para clarificar el líquido aún más y eliminar los residuos de levadura. Coloca el alcohol en una botella para conservarlo.
No guardes el líquido alcohólico en un garrafón por más de un mes, ya que puede oxidarse con el tiempo. - Filtra con un filtro de carbono si así lo deseas. Elimina los componentes volátiles indeseados usando un filtro de carbono de grado alimenticio, así purificarás el alcohol aún más. Si se han agregado sabores antes de este punto, no deberás usar un filtro de carbono, ya que lo más probable es que los elimine.
- Bebe de forma responsable. Agrégale el alcohol directamente a tu licor casero o añade saborizantes para licores. También puedes añejar el alcohol en botellas selladas a fin de mejorar el sabor, en especial si vas a preparar licores. Puedes conseguir botellas nuevas en las tiendas de elaboración casera de alcohol.
- Reutiliza las botellas de licor, vino y cerveza, o usa frascos.
Advertencias
- Lo más probable es que este tipo de alcohol en bruto sepa mal si no se consume junto con algo que oculte el sabor. Además, si bebes demasiado, podrías sufrir una resaca que nunca olvidarás.
- Si la cubeta de fermentación está sellada sin una esclusa de aire para ventilar los gases de la fermentación, la cubeta explotará y lo más probable es que ensucie mucho.
- La temperatura óptima para que las células de la levadura respiren de forma anaeróbica es 38 °C.
- Puedes destilar el producto final para preparar tu propio vodka. Ten en cuenta que este es un proceso bastante peligroso, ya que los gases son muy inflamables y es ilegal realizarlo en la mayoría de los países.
- Puedes reemplazar la gaseosa con jugo de fruta.
- Para obtener un mejor sabor, puedes filtrar la levadura con un filtro de carbono.